Un relevo que dura más de dos años

La figura de Jesús Catalá, obispo de Alcalá de Henares, vuelve a sonar con fuerza como sustituto de Dorado Soto, más de dos años después de cumplir 75 y presentar su renuncia

JOSÉ VICENTE RODRÍGUEZ. MÁLAGA Han pasado dos años y tres meses desde que en junio de 2006, el obispo de Málaga, Antonio Dorado, cumpliera 75 años y presentara su preceptiva renuncia al Papa como prelado de la diócesis. Sin embargo, la aceptación de esta renuncia por parte de la Santa Sede y el anuncio de su relevo han sido postergados desde entonces, y algún posible sustituto ha encontrado destino en otros lares. Con el camino más despejado, en los últimos días varios blogs de expertos en religión han señalado como muy próximo el nombramiento de Jesús Catalá, actual obispo de Alcalá de Henares. La propia prensa de esta localidad se ha hecho eco de estos comentarios. Fuentes del Obispado de Málaga recuerdan que los rumores y los nombres vienen sonando de forma insistente, aunque reconocer que el desenlace, por lógica, "parece estar ya cercano".

1. Larga reflexiónLa demora en la aceptación de la renuncia de Antonio Dorado pareció estar motivada, durante el primer año, en el famoso ´periodo de reflexión´ que el Vaticano se toma para buscar un sustituto (normalmente empieza a sondear a muchas personas para conocer el pulso de la diócesis antes de plantearse una terna de candidatos)y en las responsabilidades que el prelado malagueño mantenía en la Conferencia Episcopal Española (CEE), donde dirigía la Comisión de Educación. Se pensaba entonces que las candentes cuestiones que planeaban sobre esta materia -entre ellas la Educación para la Ciudadanía- no aconsejaban un relevo abrupto. Pero ese argumento expiró en marzo de este año, tras la reelección de Antonio Rouco Varela al frente del órgano episcopal. Antonio Dorado era sustituido por el obispo de Segorbe-Castellón, Casimiro López Llorente.

2. Terna de obisposOcurre que en este tiempo uno de los prelados que más sonaron para venir a Málaga ha sido designados para otros cargos: el ya ex obispo de Jerez, Juan del Río, fue designado por Roma a finales de junio como nuevo arzobispo castrense. Del Río, que sí renovó sus responsabilidades en la CEE al frente de la Comisión de Medios de Comunicación, era bien visto en Málaga por su cercanía de carácter (es onubense), aunque en asuntos eclesiales el favoritismo a veces juega malas pasadas. Otro de los que ha sonado es el obispo de Almería, Adolfo González Montes, aunque en su caso, y pese a su fama de gran teólogo, con el efecto contrario al que podía despertar Del Río: su carácter y personalidad son vistos con más reparos por algunos.

3. ¿Quién es Catalá? Así las cosas, Jesús Catalá es el único candidato (de los visibles) que sigue disponible. Este valenciano de Villamarchante, nacido el 22 de diciembre de 1949, ya fue noticia en 1999, cuando sustituyó en el cargo que ahora ostenta a Manuel Ureña convirtiéndose entonces en el prelado más joven de España. Desde 2005 es presidente de la Comisión de Pastoral y miembro de la Comisión Permanente de la CEE.Catalá se ordenó sacerdote el 3 de julio de 1976 y ejerció su ministerio en los municipios valencianos de Rotglá-Corbera, Granja de la Costera y Albal, además de ser profesor de religión en un instituto de Xátiva. Su formación incluye la licenciatura en Teología, Filosofía y en Ciencias de la Educación por la Universidad de Valencia, y el doctorado en Teología por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. Catalá acompañó al Papa Juan Pablo II en sus viajes apostólicos a Costa de Marfil (1990), Angola (1992) y Uganda (1993), hasta que el 25 de marzo de 1996 fue nombrado obispo auxiliar del arzobispo de Valencia. Allí destacó por ser uno de los pocos prelados que pronunciaba algunas partes de sus homilías en valenciano.

4. A Tierra SantaMientras el Vaticano apura los tiempos antes de nombrar a su sustituto, Dorado proseguir su actividad al frente de la Diócesis con toda normalidad, y con una agenda cargada hasta los topes. En los próximos días, el obispo tiene previsto realizar un viaje a Tierra Santa junto con peregrinos malagueños. Sea cuando sea el relevo, Dorado Soto no dirá adiós a Málaga, ya que piensa quedarse por tiempo indeterminado en la Casa de Espiritualidad del Seminario de Málaga, que ha habilitado unas dependencias para sacerdotes jubilados. Allí también reside desde hace unas fechas Fernando Sebastián, arzobispo emérito de Pamplona y que fuera unos meses administrador apostólico en Málaga a mitad de los 90, antes de la llegada del propio Dorado Soto.